Desde hace años hemos visto cómo las grandes tecnológicas se han convertido en un aspirador que, a golpe de talonario, se han ido apropiando del mercado a base de realizar compras millonarias. La estadounidense Square, una plataforma de pagos y finanzas digitales fundada y comandada por el CEO de Twitter Jack Dorsey, ha protagonizado recientemente una de estas operaciones de tintes estratosféricos. Ha pagado 28.000 millones de dólares por fagocitar Afterpay, una ‘fintech’ australiana desconocida para el gran público a pesar de que tiene presencia en medio mundo, incluso en España, donde opera a través de la marca ‘ClearPay’. A lo que se dedica esta firma es a lo que se conoce en el argot especializado como ‘BNPL’. En una traducción gruesa vendría a significa ‘Compra ahora, paga después’. En resumen, aplazar pagos. ¿Qué motivo ha llevado a Square a protagonizar un movimiento mayúsculo como este y soltar una cantidad mayor a la que pagó Microsoft por LinkedIn o Facebook por WhatsApp?
Fundada en 2014 por Anthony Eisner y Nick Molnar como una «alternativa más saludable» que la tarjeta de crédito, no tardó en convertirse en una de las ‘big tech‘ australianas. En los últimos cursos ha vivido en los últimos años su particular agosto (en 2020 cerró con 347 millones de dólares de ingresos, prácticamente el doble que el curso anterior) gracias a la explosión del comercio ‘online’ generado por la pandemia. Su eslogan de ‘Compra ahora. Paga en 6 semanas. Sin intereses’ ha sido un imán para miles de compradores que no han dudado en recurrir a sus servicio. En la actualidad, cuenta con 16 millones de cliente.
La digestión de Afterpay, cuya estructura quedará fagocitada y disuelta en la primera, reforzará a Square, que puede convertirse en un incómodo invitado en la industria bancaria ya que, entre otras cosas,están dispuestas a acabar con la omnipresencia de algo tan común y extendido como las tarjetas de crédito. «Tenemos un propósito compartido. Creamos nuestro negocio para hacer que el sistema financiero sea más justo, accesible e inclusivo”, aseguran ambas compañías en un comunicado conjunto con motivo de la compra.
Un consejo que recibió Nick Molnar cuando tenía apenas 18 años fue el que con el paso del tiempo le inspiraron a crear esta empresa. “Me dijeron: ‘No gastes el dinero que no tienes’”, contaba a ‘The Wall Street Journal’ el año pasado, que decidió entrevistarle por el éxito descabalgado que cosechaba su compañía. A día de hoy, además de en su mercado natal, opera en Nueva Zelanda, Canadá, EEUU, Reino Unido, Italia, Francia y España (bajo el nombre de Clearpay) y tiene planes para expandirse a nuevos mercados.
Un negocio que también atrae a Apple
Tras esta operación, la firma de Dorsey toma posiciones en un negocio en el que ya habían empezado a operar plataformas como PayPal. Pero no es ni mucho menos el único que pretende asaltarlo. Bloomberg informó sobre los planes de Apple de incorporar un nuevo servicio de ‘buy now pay later’, que estará disponible para los usuarios de Apple Pay.
Era de cajón que la pandemia podía beneficiar a las empresas que ofrecen servicios ‘BNPL’ y Square ha visto en esta compra una oportunidad de crecimiento evidente. Una de las cosas que les puede permitir el sistema de AfterPay es acercarse a un público más joven, que se suele encontrar con más dificultades para acceder a tarjetas de crédito al tener unos ingresos más bajos. Además, la tecnología de la firma australiana permitiría ofrecer este aplazamiento de los pagos directamente en la tienda.https://datawrapper.dwcdn.net/WEb8r/1/
“Square planea integrar Afterpay en sus unidades comerciales de Seller y Cash App existentes, permitir que incluso los comerciantes más pequeños ofrezcan BNPL en el momento del pago, brindar a los consumidores de Afterpay la capacidad de administrar sus pagos a plazos directamente en la aplicación Cash y brindar a los clientes de la aplicación Cash la capacidad de descubrir comerciantes y ofertas de BNPL directamente dentro de la aplicación”, han explicado las compañías en su comunicado.
CashApp funciona desde 2013, permitiendo a sus usuarios vincular su tarjeta de crédito y realizar distintas operaciones que incluyen la compra de acciones y bitcoins. Al integrar en ella Afterpay, los usuarios no necesitarán una cuenta bancaria ordinaria y podrán operar únicamente con la ‘app’. En 2020 la empresa de Dorsey ya logró una licencia bancaria y, en julio de este año, lanzó Square Banking, un conjunto de herramientas financieras destinadas a pequeñas empresas.
En 2020, según Cornerstone, en EEUU se compraron bienes por valor de 24.000 millones de dólares con programas BNPL. Una cifra que, estima la consultora, estará cerca de cuadriplicarse en 2021. Además, cabe destacar su uso entre el público más joven. Tal y como recoge Forbes, en EEUU, desde principios de 2020, cuatro de cada diez jóvenes pertenecientes a la generación Z o Millenials; y tres de cada diez de la Generación X (nacidos entre 1965 y 1979) habían usado este método de pago.
Más usuarios y de mayor renta
Los 28.000 millones invertidos en Square no han sido únicamente para incorporar la facilidad del ‘buy now, pay later’ a sus ‘apps y ponerlo a disposición de sus clientes más jóvenes. La empresa estadounidense sumará los clientes de la compañía australiana a su plataforma. De esta manera pasará de tener 70 millones de usuarios a tener 86, con las oportunidades que esto les brinda para ofrecerles nuevos servicios.
Pero la cosa no va solo aumentar su número de usuarios, sino atraer a un conjunto de clientes de mayor renta. Square tiene mucho margen de mejora a la hora de atraer compradores y vendedores. Solo el 13% de los usuarios de su aplicación ganan más de 100.000 dólares al año. Una estadística sensiblemente inferior al sector del BNPL, donde se calcula que aproximadamente uno de cada clientes que recurre a estos métodos supera esos ingresos.
Fuente: elconfidencial.com (4/8/21) pixabay.com