En 25 años trabajando en la industria logística como ejecutivo, he visto y vivido muchas situaciones diferentes en el mercado. Sin embargo, la situación actual es realmente única: si bien existe una gran demanda de servicios de transporte, la industria se encuentra en un momento difícil, debido a las condiciones económicas existentes en Europa.
A pesar del revés sufrido en marzo de 2020, las empresas de transporte por carretera no han parado en ningún momento y la media de precios por sus servicios en Europa ha aumentado en consonancia con ello. Podría pensarse que esto beneficia a los transportistas, pero ha ocurrido lo contrario, pues mientras la economía global trata de adaptarse a la creciente demanda, los precios de los materiales más importantes continúan en aumento.
Esto incluye el petróleo, y desde que el precio de este comenzó a escalar, también lo hicieron los gastos para las empresas de transporte. A pesar de que los consumidores han gastado más que nunca durante la pandemia, con el consiguiente aumento de la demanda de servicios de carga completa, las empresas cargadoras han tenido que enfrentarse a la inflación, que supone un aumento de costes para todos, incluidos los operadores de transporte.
Más de un 20% de los costes de transporte están relacionados con el combustible.
Aunque el elemento más obvio que explica la subida de precios en el último año es el combustible, otros gastos operativos han aumentado también, desde los salarios o costes administrativos hasta el mantenimiento de tractoras y semirremolques.
Más de un 20% de los costes de transporte están relacionados con el combustible. Si se combina esto con el hecho de que los precios del combustible han alcanzado y se han estancado en niveles récord de 1.500 euros por cada 1.000 litros de combustible en la Unión Europa, llegando en la Eurozona a 1.530, el problema de los costes operativos no ha hecho más que agravarse.
También el aumento del precio del gas ha tenido una influencia negativa en el sector, mientras que el precio del AdBlue ha continuado su escalada, en línea con el del gas natural. La pandemia ha afectado igualmente a los costes administrativos, pues ha sido necesario comprar equipos de protección personal, como mascarillas, guantes o gel desinfectante, para proteger a nuestros empleados, a los empleados de nuestros clientes y a las comunidades que nos rodean.
Escasez de conductores y crisis de microchips
Las empresas de transporte han experimentado un crecimiento de los costes operativos también debido a la falta de recursos humanos y de vehículos. Mientras que en Europa se ha vivido una escasez de conductores como nunca antes, los fabricantes de camiones han tenido que esforzarse mucho para producir suficientes unidades, especialmente por la crisis de semiconductores.
En ambos casos, esto ha supuesto más gastos para contar con los suficientes recursos. La falta de conductores es un problema que siempre está presente en la mente de los ejecutivos del sector, pero desde Girteka Logistics han tratado de resolver este asunto analizando lo que tenemos para ofrecer a nuestros potenciales compañeros.
Hasta ahora, ninguno de nuestros camiones permanece inactivo en las bases de transporte y se mueven a diario, lo que supone que hemos sabido retener y reclutar conductores, además de encontrar las soluciones correctas para nuestros clientes.
Al tener una flota de vehículos muy joven, podemos ser más eficientes en términos de costes y proporcionar un ambiente más confortable a nuestros trabajadores para aliviar su estrés y su carga de trabajo. Si bien es cierto que la pandemia ha empeorado el problema de la falta de conductores en Europa, también ha puesto de relieve lo crucial que es el bienestar de los empleados, encargados de mantener en funcionamiento la cadenas de suministro.
En lo que se refiere a las áreas de descanso y aparcamiento, es importante hacer sentir a los conductores lo más cómodos posible cuando están lejos de sus casas para que continúen en la profesión y sigan entregando mercancías a los clientes, ya sean alimentos o productos farmacéuticos.
Los fabricantes han tenido dificultades para producir un número suficiente de vehículos para satisfacer las necesidades de las empresas.
Esto supone que tenemos que asegurarnos de contratar al número de conductores adecuado para mantener nuestras mercancías en movimiento. Para ello, hemos tenido que revisar sus salarios en varias ocasiones a lo largo del año para seguir siendo una empresa atractiva y competitiva para ellos. Hemos trabajado duro en este área y podemos decir que el 70% de nuestros conductores recomiendan trabajar en Girteka Logistics.
De manera similar, la falta de semiconductores ha supuesto un aumento de los precios de los camiones nuevos, y posteriormente de los usados, ya que los fabricantes han tenido dificultades para producir un número suficiente de vehículos para satisfacer las necesidades de las empresas. Esta situación está ejerciendo una presión al alza sobre el coste total de propiedad.
Escenario futuro
En la situación actual, cualquier movimiento podría afectar al mercado. Sin embargo, es difícil imaginar un escenario en el que los camiones dejen de mover mercancías, ya que a pesar de la incertidumbre, el sector siempre cumple lo acordado con sus clientes y se responsabiliza de la entrega de productos esenciales, ya sean productos de supermercado o suministros médicos.
Sí podríamos imaginar un escenario en el que los precios sigan aumentando, pues aún no han alcanzado los niveles que deberían. El precio medio de una carga en Europa ya se encuentra en niveles récord, pero la continua inflación y cualquier tipo de disrupción en la cadena de suministro podría suponer un efecto dominó para las economías locales e impulsar los costes del transporte entre un 20% y un 35%.
Los precios, naturalmente, seguirían su ejemplo, lo que supone una amenaza tanto para cargadores como para transportistas. Los cargadores han tenido que adaptarse a la nueva realidad del mercado, independientemente de su tamaño, pero los operadores tampoco son inmunes a los presiones de los costes, pues el aumento de los precios de las materias primas, incluido el petróleo, les afecta.
El caso del combustible es particularmente sensible, pues de media más del 20% de los costos operativos totales de una empresa de transporte de mercancías por carretera están relacionados con él. Por otro lado, en 2022 se esperan diversos cambios regulatorios, ya que el Paquete de Movilidad incluirá nuevas normas para las empresas del sector.
Estas, sin duda, mejorarán las condiciones laborales de nuestros empleados. Aunque se prevé que puedan suponer un aumento de los precios, Girteka Logistics se ha estado preparando para estos cambios y ha tomado la decisión de ampliar su presencia en Polonia para estar más cerca de los clientes y reforzar nuestra presencia en Europa occidental.
Fuente: cadenadesuministro.es (9/12/21) pixabay.com