En 2004, Alejandro abrió un negocio de informática en el extrarradio de Sevilla. Hoy, 16 años después, la vida le ha cambiado totalmente: tiene una empresa con presencia en 100 países, cerca de 200 empleados y factura 20 millones de euros al año. La mitad de ellos, por cierto, a Telefónica. Y la esencia de su negocio no ha cambiado mucho: reparar y reacondicionar ordenadores, móviles y todo tipo de dispositivos electrónicos. Esta es la historia de Alejandro Costa, fundador y CEO de Myfixpert.
Hace 16 veranos, la adaptación de los españoles a la tecnología estaba a años luz de la actual, así que el modelo de este andaluz de 23 años que venía de trabajar como técnico de sistemas en Indra era muy distinto. «Éramos una pequeña tienda de barrio, así que hacíamos lo normal. Formatear el ordenador, instalar el sistema operativo, cambiar el disco duro, arreglar el móvil… Lo que la gente necesitaba en aquella época», nos cuenta.
Rústico pero de éxito
Pese a lo rústico del modelo, Alejandro pilló una buena época. Era el momento en que las empresas empezaban con aquello del salto digital y, de camino, pilló el ‘boom’ inmobiliario. «Fuimos cogiendo muchas constructoras como clientes, nos pedían que les vendiésemos e instalásemos los ordenadores, los sistemas y demás. También nos empezaron a llegar bares y restaurantes, a los que les hacíamos los TPV [datáfonos] para que la gente pudiese pagar con tarjeta».
A partir de ese punto, empezaron a llegar los clientes gordos, compañías de entidad. «Nuestra primera internacionalización fue cruzar Despeñaperros con el AVE«, bromea Alejandro, quien reconoce que la crisis de 2008 les golpeó pero, visto lo visto, consiguieron surfearla. «Íbamos muy poco a poco, conseguimos ser servicio técnico oficial de todos los fabricantes importantes (Lenovo, Asus, MSI, Toshiba, Samsung o LG) y cada vez teníamos más clientes grandes, así que todos los años crecíamos un 10% o un 15%».
El punto de inflexión: la llegada de Telefónica
Con el tiempo, la compañía de Alejandro Costa fue expandiéndose a nivel internacional. En mitad de ese crecimiento decidió incluyó un servicio de autodiagnóstico ‘online’ de dispositivos para sus clientes. «Igual que cuando vas al médico dices tus síntomas y te hacen un diagnóstico, nosotros partimos del razonamiento automático: los usuarios pueden entrar en la web, rellenar un formulario automático con lo que le pasa a su dispositivo y le damos un diagnóstico de lo que puede pasarle y un presupuesto», cuenta. Además, «esta causa-efecto la metemos en una base de datos y buscamos patrones para mejorar las predicciones».
Este fue uno de los detalles que hizo que en 2015 llegara su mayor punto de inflexión: en enero de 2015 la empresa se alió con Wayra, la aceleradora de ‘startups’ de Telefónica. Algo que poco después, octubre de ese mismo año, le abriría las puertas del primer operador nacional de par en par. La teleco invirtió 80.000 euros para hacerse con el 10% de Myfixexpert. Telefónica sigue siendo, un lustro después, su mejor cliente. Le supone una facturación de 10 millones de euros. Eso sí, su participación no es la misma: ahora es dueña del 2%.
20 millones, 100 países y 200 empleados
Con el paso del tiempo, Myfixpert ha pasado de ser una tienda de informática de un barrio de Sevilla a una compañía que repara o reacondiciona 300.000 equipos al año, con presencia en 100 países de todo el mundo y con una plantilla de cerca de 200 empleados.
En el aspecto financiero las cosas tampoco funcionan nada mal. Myfixpert funciona a través de dos sociedades, Core & Global IT Solutions SA y Telco Advanced Services SL. Según las cuentas oficiales presentadas ante el Registro Mercantil, ambas empresas facturaron 19,4 millones en 2016, 18,7 millones en 2017 y 15,8 millones en 2018, aparte de los 20 millones que Costa asegura a este diario haber facturado en 2019.
El futuro: salir al MAB en 2021
La llegada del covid-19 no ha resultado indiferente para Myfixpert, pero Costa asegura que supieron anticiparse para que el negocio no se viese demasiado afectado: «En enero apreciamos que el mayor proveedor de piezas del mundo, China, tenía problemas, por lo que invertimos para tener una mayor cantidad de stock«. En cualquier caso, «estamos sufriendo la crisis, como todas las empresas. Durante el estado de alarma la gente ha cuidado su tecnología, se ha estropeado menos o prefieren aguantar. Ahora estamos repuntando».
En lo que sí he afectado de lleno el covid es en uno de los planes más ambiciosos que tenía la compañía: salir al Mercado Alternativo Bursátil (MAB) a lo largo de 2021 con la entrada de inversores minoritarios durante este año. La situación actual ha retrasado estos plazos, aunque Costa espera que no se alarguen demasiado: «Estamos en el entorno del premercado. Es el momento de demostrar nuestra capacidad de resiliencia. Somos una empresa solvente: nos centramos en la tracción, en generar ingresos y dar beneficios. La inversión llegará sola».
Fuente: Elconfidencial.com (10/06/20) Pixabay.com