El Govern multará a los establecimientos turísticos e intermediarios en la búsqueda de alojamiento que no paguen la tasa turística con hasta el 300% del importe impagado y que hayan percibido previamente de los usuarios, según el régimen sancionador específico vinculado a la aprobación de los Presupuestos 2017 de la Generalitat.
Se trata de infracciones tributarias tipificadas como ‘muy graves’, con un multa mínima de 600 euros para los alojamientos -cuando el importe no abonado sea superior al 10% del total que deberían ingresar- y de 2.000 para los intermediarios, sin límite máximo en ambos casos, han explicado fuentes de la Generalitat.
Estos parámetros implican una labor de gestión e inspección que llevará a cabo la administración tributaria, que «dispone de las herramientas para comprobar los datos declarados», han agregado desde el Govern.
También se establece como infracción leve -con una multa fija de 300 euros- no consignar en la autoliquidación del impuesto el código de identificación del alojamiento, o consignarlo de forma incompleta o inexacta.
Sin embargo, el procedimiento para obtener el código está pendiente de establecer por parte de la Agencia Tributaria de Catalunya (ATC).
Así, la ATC debe elaborar una resolución para definir la estructura y formato del código de identificación para cada tipo de establecimiento y equipamiento.
El Govern también prevé elaborar «en breve» el reglamento que debe regular el procedimiento para habilitar a los intermediarios como asistentes en la recaudación de la tasa turística, así como el contenido del convenio que deben firmar con la administración.
Aumento de la tasa para 2017
El Govern prevé incrementar la recaudación de la tasa turística en 2017 por los cambios que se introducirán si el Parlament aprueba los Presupuestos.
Y es que equipara la tasa de los pisos turísticos de la ciudad de Barcelona a la de los hoteles de lujo, con 2,25 euros por noche, mientras que los clientes de pisos turísticos del resto de Catalunya deberán pagar 0,9 euros por noche, como los hoteles de cuatro estrellas catalanes que no están ubicados en la capital.
Hasta ahora, los clientes de pisos turísticos deben pagar 0,65 y 0,45 euros por noche dependiendo de si están en Barcelona o fuera.
También se introduce la figura de asistente en la recaudación, que obliga a los intermediarios en la búsqueda de alojamiento -como pueden ser agencias de viajes, webs y apps- a cobrar y liquidar la tasa turística.
Además, añade una tasa para los cruceristas que están en Barcelona menos de 12 horas, de 0,65 euros, frente a la tarifa existente hasta ahora para más de 12 horas, que se mantiene en 2,25 euros.
Fuente: Eleconomista.es (9/1/17) Pixabay.com
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