«Ganar, ganar y volver ganar», es la frase con la que el mundo del fútbol recuerda al maestro Luis Aragonés. Algo aplicable a los equipos profesionales y sobre todo a los de élite, como aquella selección española que conquistó los corazones futboleros de Europa en 2008. Pero para muchos clubes amateurs, ganar, ganar y volver ganar es el sueño, y la realidad es sobrevivir, sobrevivir y seguir sobreviviendo. Caos FC (#0, los jueves a las 22.00), presentado por Michael Robinson y Raúl Ruiz, busca esos equipos de aficionados que son un desastre, que apenas están organizados, a los que les cuesta no ya solo ganar, sino entrenar, llegar al fin de semana con al menos 11 jugadores disponibles, existir al fin y al cabo. Durante una semana, Robinson y Ruiz se hacen cargo del club ofreciendo consejos y apoyo para al menos darles una victoria, la de vivir el fútbol con ilusión y alegría. Ganar en este caso es salir al campo orgulloso de su equipo. Con eso vale.
En cada capítulo de los seis que tiene el programa, Robinson y Ruiz viajan a una localidad donde hay un equipo amateur que es un caos y pasan una semana con ellos. Para ello cuentan con la ayuda de estrellas del fútbol que ayudan en los entrenamientos y en la motivación para dar un paso al frente. Nombres como Donato, Rafa Alkorta, Pablo Alfaro, Gregorio Manzano, Pedja Mijatovic y Marcos Senna. Pueblos de Orense, Madrid, Badajoz, Asturias, Almería y Segovia son los destinos.
El fútbol es importante, pero el objetivo del programa es también contar las historias humanas que hay detrás de estos equipos. Un formato que es el colofón del trabajo de Raúl Ruiz (Logroño, 1966), exjugador de aquel Numancia que casi elimina al Barcelona de Cruyff de la Copa del Rey y reportero desde hace 20 años en Canal +, la Cadena SER y ahora Movistar +. Fue precisamente Robinson el que le abrió el camino del periodismo deportivo y la posibilidad de contar el lado más humano del fútbol. «Llevo semanas [grabando el programa] con una sonrisa permanente, no lo he pasado tan bien en mi vida», dice Robinson en la presentación del programa. «Raúl me ha enseñado una parte del fútbol que no conocía, había momentos que no sabía si estaba haciendo un programa o un [documental de] National Geographic de fútbol», comenta el también presentador de Informe Robinson.
«He vivido todo esto en mi barrio de Logroño, ahí jugué en campos de tierra, sin material, las botas tenían que durar toda la temporada. La ilusión era enorme, pero la desorganización también, es muy duro mantener un club sin los recursos necesarios y que haya gente que ocupe su tiempo por el club dejando a un lado familia u ocio para que no se abandone el fútbol en ese barrio», dice Ruiz a EL PAÍS. «También he vivido estar un año entero sin cobrar en un club, pero en el caso de ellos, como son amateurs y no hay dinero de por medio, es totalmente sano y noble». Ruiz deja claro que no pueden hacer milagros y que los equipos comiencen a ganar de pronto, «pero sí sentar unas bases de concepto de fútbol, compañerismo, de tener compromiso, de amor al color, de orgullo».
El programa está lleno de historias de superación y momentos bonitos y emocionantes, pero Raúl Ruiz deja claro que a veces también hay situaciones complicadas o doloras. «Lo más duro es que durante una semana les metemos caña cuando vemos que las cosas no se hacen bien y toda esa semana, esa carga de emoción que tienen, esa responsabilidad, llega el domingo, no ganan y veo llorar a los chavales al terminar los partidos, se me cae el alma a los pies. Ellos, por orgullo, aunque hayan perdido todos los demás partidos, quieren ganar porque estamos nosotros allí». En otras ocasiones, «hay situaciones raras», comenta el exfutbolista. «Hay veces que pensamos, por mucho que trabajemos aquí, va a ser complicado. Hay entrenadores que tienen un carácter que ya es muy difícil de reconducir y por mucho que les hables y trabajes con ellos te dicen que sí, pero te das cuenta de que no te están escuchando».
Entre bromas, Raúl Ruiz cuenta que hay amigos que ya le están pidiendo que aplique la filosofía de Caos FC a clubes profesionales e históricos de Primera División que no están pasando por su mejor momento. «Esto no se puede hacer en equipos que hay sueldos. Cuando está el dinero de por medio y se convierte en un trabajo, ya no tiene sentido, con profesionales ya no pintamos nada ahí».
Fuente: Elpais.es (24/11/16)
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