El Gobierno venía apuntando en los últimos meses que había aumentado la recaudación en 2014 respecto al año anterior cerca del 5%. En parte se debe a la mejora económica, pero también a la de los resultados en la lucha contra el fraude fiscal.
Aunque hasta el jueves la Agencia Tributaria no facilitará el detalle de estos datos, según adelantó ayer en Sevilla el ministro de Hacienda,Cristóbal Montoro, la recaudación sobre el fraude en 2014 alcanzó los 12.318 millones, una cantidad jamás conseguida. Esta cifra supone un incremento del 12,3% sobre los 10.950 millones de 2013, cuando por primera vez en 23 años descendieron los ingresos respecto al ejercicio anterior (11.517 millones). Esta caída se produjo al haberse agotado los cobros pendientes de sentencias favorables del Tribunal Supremo que correspondían a la Delegación de Grandes Contribuyentes (grandes patrimonios y las empresas más importantes del país) que habían estado remansados en los años anteriores.
Según Montoro, estos resultados tienen «más mérito si cabe» cuando se han obtenido en momentos de restricción presupuestaria y sobre unos ejercicios no prescritos de años anteriores en donde las bases imponibles estaban en disminución como consecuencia de la crisis económica. Para el ministro, «la lucha contra el fraude fiscal está teniendo en España los mayores éxitos de su historia».
El ministro recalcó también que estos resultados son fruto de las reformas económicas, de carácter estructural, aprobadas en los últimos tres años por el Gobierno. Entre ellas, enumeró la aprobación de la ley antifraude (que eleva las penas a los grandes defraudadores y limita el pago en metálico a 2.500 euros), la nueva obligación de declarar bienes en el extranjero y los nuevos acuerdos de intercambio de información tributaria, que han supuesto un avance «definitivo» en la lucha contra el fraude fiscal.
Según Montoro, todas las medidas que ha adoptado en esta legislatura han facilitado el afloramiento de las mayores bases imponibles, hasta ahora ocultas.Puso como ejemplo las declaraciones de bienes y derechos en el extranjero, «que hoy están perfectamente identificadas, también sus titulares«.
El caso es que la declaración de los bienes y derechos en el exterior, cuyo plazo finalizó en marzo de 2014, y la colaboración informativa de algunos países, ha sido fundamental para incluir en los planes de inspección a estos contribuyentes.
También han sido importantes las comprobaciones que la Agencia Tributaria ha realizado sobre los contribuyentes que se acogieron a la amnistía fiscal abierta en 2012. En este sentido, este organismo ha establecido unos perfiles de riesgo con la información obtenida sobre quienes habían regularizado teniendo un proceso administrativo abierto o un procedimiento judicial. También sobre quienes tenían una actividad profesional y regularizaron cantidades que nada tenían que ver con las propias de la actividad. Además, la investigación se ha centrado en el uso de testaferros a la hora de acogerse a este proceso para que no apareciera el titular real de los bienes.
También ha dado frutos el plan especial de control de sociedades profesionales que situaron por medio una sociedad pantalla para acogerse al Impuesto de Sociedades, con incluso de gastos y menos tributación que al IRPF, y con un tipo marginal de hasta el 52% en estos años. En las redes de Hacienda han caído famosos deportistas, artistas, músicos, tertulianos y presentadores de radio y televisión.
Dejar una contestacion